"... todavía quedan más pistas por descubrir."

miércoles, 13 de abril de 2011

AMORES QUE MATAN - CRÍMENES PASIONALES



Como se mencionó en la primera parte, los celos son un fenómeno universal, sin embargo, los factores socioculturales influyen en la actualización del potencial celoso de cada persona. En un grado moderado, los celos pueden estimular comportamientos positivos, pero cuando se manifiestan en exceso, devienen destructivos.

Existe un celo psicótico caracterizado por delirios que no pueden ser quebrantados con argumentos ni evidencias contrarias. Las formas delirantes de celos son consideradas como las más preocupantes y peligrosas, ya que no suele haber manera alguna de convencer al sujeto de que su creencia es errónea. El celo delirante se presenta en sujetos de ambos sexos, y es un factor determinante en algunos crímenes pasionales.

CRÍMENES PASIONALES

Una de las consecuencias de los celos patológicos es el homicidio o crimen pasional. El homicidio por celos suele darse en sujetos con diferentes patologías, incluida la paranoia. En los casos de homicidio por celos es más frecuente el crimen de la pareja que el del rival. Esto se confirma tanto en las mujeres como en los hombres celosos. No obstante, el crimen de la pareja es mucho menos perpetrado por mujeres en comparación con los hombres.

Por otra parte, las ideas de muerte de la pareja que van acompañadas de suicidio son casi exclusivamente masculinas. Entre los criminales pasionales de sexo masculino, las ideas de suicidio aparecen en un 30% de los casos, a pesar de que sólo el 20% de los que tienen esas ideas se suicida. Las ideas de suicidio que van acompañadas de la muerte del rival, son casi inexistentes. El suicidio se corresponde con un rechazo y con una negación de la realidad.

Las personas que comenten un crimen pasional pueden ser muy diferentes desde el punto de vista psicopatológico. En sentido general, entre los casos de sujetos celosos que asesinan a sus parejas, podemos distinguir tres tipos:

1.En el tipo más frecuente, los hechos suceden conforme a una secuencia que es aproximadamente la siguiente: primero, un conflicto pasado enfrenta al celoso con su pareja. Luego, el conflicto se agudiza y el celoso piensa en la posibilidad de eliminar a su pareja. Posteriormente, el sujeto comete el crimen a raíz de una discusión intensa, que suele ir acompañada de ingesta de alcohol, y que a menudo, ocurre porque al celoso le niegan las relaciones sexuales o porque su pareja hace una observación desdichada, generalmente burlona o grosera. El crimen es un acto impulsivo que ocurre en el marco de un conflicto que se agudiza. El sentimiento de injusticia vivido por el celoso ha jugado, en estos casos un rol antiguo y profundo, e interviene todavía durante los instantes que preceden al acto criminal. La existencia de la pareja se ha convertido en una fuente de irritación intolerable para el victimario. El celo homicida constituye la escenificación de un mito narcisista de omnipotencia. En efecto, el crimen pasional expresa el predominio del principio de placer sobre el de realidad. La muerte de la pareja expresa y satisface el odio y la cólera. Se trata de una descarga, de un acto sádico en el que predominan la afirmación narcisista de sí, así como la negación del otro y de la realidad.

2.En un segundo tipo, el homicidio constituye un acto impulsivo que ocurre después de un conflicto prolongado, aun cuando no hay un plan deliberado. El homicidio se realiza bruscamente, es un estado emocional paroxístico. Constituye un acto automático, inconsciente y amnésico, que libera al celoso de una existencia intolerable. El sujeto mata a su pareja para evitar que esta lo abandone o se vaya a vivir con su rival.

3.En un tercer tipo de crimen pasional, el acto homicida es una reacción de defensa, en la medida en que el celoso cree que su pareja amenaza su vida o su libertad. Él tiene la certeza delirante de que su pareja trata de envenenarlo, lo amenaza o practica la brujería, por ejemplo. Este es el tipo de crimen pasional que puede presentarse entre los pacientes paranoicos.

Cada cierto tiempo, nos enteramos con asombro de que un hombre llega al extremo de matar a su compañera, a sus hijos y finalmente a suicidarse. Podemos hacer un esfuerzo e intentar explicar el crimen de la pareja, considerando los conflictos y los celos provocados o fantaseados. Pero, ¿qué motiva a ese hombre a matar a sus hijos?

Con frecuencia se invoca el machismo como un factor sociocultural determinante. Sin embargo, el machismo por sí solo no permite explicar los crímenes pasionales. Por otra parte, una explicación psiquiátrica no siempre se cree justificada porque el testimonio de las personas próximas no siempre confirma la existencia de una locura manifiesta. Sin embargo, cuando la pasión perturba el equilibrio mental de una persona, se convierte en un estado mórbido que polariza la actividad mental y elimina el juicio del sujeto.

Existen estados pasionales mórbidos que se complican progresivamente y finalmente, provocan crisis trágicas, cuando conllevan una descarga explosiva de la pulsión de la muerte. Un hombre aparentemente normal puede convertirse en el protagonista de una tragedia pasional.

Los individuos con delirios pasionales crónicos de tipo paranoico o con brotes delirantes agudos tienen un control precario de la agresividad. En determinadas circunstancias, caracterizadas por sentimientos de abandono o de rechazo, dejan de operar los mecanismos de defensa que normalmente le permiten al ego manejar la angustia de separación y surge la pulsión de muerte de un modo masivo, provocando la tragedia pasional.

La crisis delirante conlleva la muerte de hijos, cuando, aniquilando la decencia, el asesino anula las tensiones de la vida generadas por la angustia de la separación. Fracasa la unidad con el otro, con esa pareja idealizada como una posesión absoluta y la única alternativa que vislumbra el sujeto para recuperar la añorada paz de la unidad primordial es la aniquilación total. En este sentido, la pulsión de muerte debe ser entendida como el deseo de un no deseo; como un último anhelo de anular las diferencias mediante el exterminio.

Las tragedias pasionales provocadas por la manifestación masiva de la pulsión de muerte tienen su origen último en la incapacidad del sujeto delirante de hacer el duelo de la unión primordial con la madre. El duelo no hecho se desplaza hacia la pareja sexual y ante la imposibilidad de recuperar la unidad soñada, la única “solución” vislumbrada por el individuo es la aniquilación total de sus partes. Sólo así se pretende recuperar ese tiempo primordial en el que se anulan todas las diferencias.

Bibliografía

LA PARANOIA Y LOS CRÍMENES PASIONALES. Ciencia y Sociedad, Vol. XXXIII, Núm. 2, abril-junio, 2008, pp. 223-236. República Dominicana

4 comentarios:

  1. su articulo es muy interesante!!! Por experiencia propia puedo decirle que los celos son lo peor que una persona puede sentir, y muchas veces son provocados por la pareja, a drede, y esas actitudes con las que hacen que el problema se agrande y no se pueda llevar, es una sensación de impotencia, miedo a perder al ser amado, inseguridad total, desamor, todo esto lleva a una persona a cometer actos que quizá nunca imagino hacer. Los celos son destructivos, muchas veces la pareja se aburre de ellos, pero el celoso no puede controlarse, aunque muchas veces intente y quiro ya no hacerlo, es una necesidad, como un vicio, el estar pensando en una misma persona todo el día, sin poder concentrarse en otra cosa que no sea el ser amado... que todo este enfocado a eso, cada minuto, cada segundo, dar y tomar como prioridad a una persona que quizá lo tomé a el como opción.... ese es el verdadero problema...

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  2. los celos son sufrimiento para ambas personas...

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  3. Gracias por visitar el blog y por plasmar su comentario. Usted acaba de describir la parte esencial del problema, enfocó con precisión los síntomas y las consecuencias que puede traer para la persona celosa y la persona a quien celan. Comparto el segundo comentario, estoy de acuerdo sobre que los celos son sufrimiento para ambas personas, por lo mismo, una forma de resolverlos consiste en el diálogo de pareja, ya sea para reconciliarse o bien para separarse, ya que si se continúa con el círculo vicioso puede culminar con resultados indeseados, si esto no funciona, la ayuda profesional es lo siguiente que debe tomarse en cuenta, eso sí, nunca aislarse, tomar las cosas a la ligera y tomar decisiones irracionales.

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  4. Primeramente hay que tener en cuenta que los celos no son de Dios.Segundo para que vas a estar con una persona en la cual no confias, antes de llegar a unos celos enfermisos que terminan con un crimen , antes de eso dejalo por mas que te duela, despues se pasa.Cuando el amor es verdadero y Dios esta de por medio no existen celos enfermisos, solo se ama ciegamente...

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