LOS PELIGROS DEL SUEÑO: CRÍMENES POR SONAMBULISMO

Para muchos, conciliar el sueño es uno de los mayores placeres, pero para quienes padecen sonambulismo puede resultar peligroso. Lo digo porque durante las últimas décadas se ha reportado más de una centena de casos de asesinatos a manos de personas que afirmaban estar sonámbulas al momento de cometer el trágico suceso.

Para conocer más sobre el tema y para que usted, apreciable lector, tenga mejor percepción del mismo, comencemos por conocer las generalidades de este trastorno.
El sonambulismo es un trastorno del sueño que se ubica entre las parasomnias, en algunos libros también puede encontrarse como noctambulismo. Las personas que padecen de este trastorno pueden realizar actividades motoras automáticas que van de sencillas a complejas. Por ejemplo, un sonámbulo puede levantarse de la cama, caminar, levantar objetos, orinar o incluso actividades más complejas como salir de su casa y andar por la calle. El sonambulismo se produce durante las fases 3 y 4 del sueño (sueño lento o sueño de ondas lentas).

Para quienes no se encuentran familiarizados con el tema y para que se entienda a cabalidad, permítanme decirles que usualmente quienes duermen pasan a través de 5 etapas: 1, 2, 3, 4 y la quinta se conoce como sueño REM (Movimiento Rápido de los Ojos). Estas etapas progresan cíclicamente desde la 1 hasta la REM para comenzar nuevamente desde la 1. Por lo general, un ciclo de sueño completo toma de 90 a 110 minutos. En la etapa 1 el sueño es liviano y la persona se puede despertar fácilmente, en esta etapa es cuando se produce la sensación de “caerse” y dar un sobresalto. En la etapa 2 el movimiento ocular se detiene y las ondas cerebrales se vuelven más lentas. En la etapa 3 las ondas cerebrales se vuelven extremadamente lentas y se empiezan a producir ondas delta. En la etapa 4 se producen ondas delta casi exclusivamente. Las etapas 3 y 4 se conocen como sueño profundo. Es en estas etapas cuando los niños mojan la cama, se producen los terrores nocturnos y el sonambulismo. Finalmente, el en periodo REM la respiración se hace más rápida, irregular y superficial. Los ojos se agitan rápidamente, aumenta la frecuencia cardiaca, la presión arterial, los hombres pueden experimentar erecciones y por lo común en esta etapa es cuando se producen los sueños.

Después de este pequeño resumen, retomemos el tema. Mencionaba que el sonambulismo se produce entre las etapas 3 y 4 del sueño. Hasta el momento, su causa es desconocida y no existe tratamiento eficaz. Es importante aclarar que el sonambulismo no es una conversión del estado de vigilia, o sea de los movimientos físicos que realiza el individuo en las escenas que está soñando. ¿Por qué afirmo esto? Pues como plasmé en el párrafo anterior, el sueño se produce en la etapa REM, más no el sonambulismo que se produce en las etapas 3 y 4 de sueño profundo.
De acuerdo a datos estadísticos norteamericanos, el sonambulismo tiene una prevalencia del 16.7% en niños de entre 11 a 16 años de edad. El 19% de la población mundial es propensa a padecer sonambulismo y los hombres tienden a padecerlo más que las mujeres.

Contrario a lo que piensan muchas personas, el sonambulismo no solo consiste en caminar sin tener conciencia de ello, como lo comenté e un inicio, pueden ocurrir actividades complejas como caminar, subir o bajar escalones e incluso cometer un asesinato.

Los sonámbulos realizan sus actividades con los ojos abiertos, por lo que pueden explorar sus alrededores y no con los ojos cerrados y los brazos extendidos como se muestra comúnmente en la televisión.

Según la literatura, existe predisposición genética para el padecimiento de este trastorno. Cuando los sonámbulos duermen, algunas áreas del cerebro funcionan como si estuvieran despiertos, mientras que otras están en las etapas del sueño. Resulta complicado demostrar la inocencia de las personas en los casos de asesinato y sonambulismo, principalmente porque se debe demostrar el largo historial de actividades nocturnas y la falta de conciencia durante el delito. Otro aspecto crucial es la carencia de motivos por parte del victimario para cometer el crimen.

Por lo general, la defensa en los casos de sonambulismo no trasciende porque la fiscalía demuestra que el acusado estuvo consciente de sus actos al momento del hecho delictivo o bien que despertó en algún momento del ataque. Para ello podría mencionar el caso de Scott Falater, quien mató de 44 puñaladas a su esposa y luego la lanzó a la piscina de su casa en una noche de enero de 1997. Guardó la ropa ensangrentada y el cuchillo utilizado para cometer el crimen dentro de un recipiente plástico que luego escondió en el baúl de su automóvil. Calmó al perro de la familia porque estaba agitado y hasta fue capaz de lavarse una herida en la mano y colocarse un vendaje para contener la hemorragia. Un vecino presenció cuando lanzaba el cuerpo de su esposa a la piscina y llamó a la policía inmediatamente. Después de su captura y durante el interrogatorio, Falater afirmó no recordar nada del hecho porque padecía sonambulismo. Este caso provocó un gran debate entre la fiscalía y la defensa quienes presentaron las respectivas pruebas acusatorias y de defensa respectivamente, incluso cada una de las partes presentó argumentos planteados por médicos expertos en sueño. El 25 de junio de 1999, después de deliberar, el jurado lo declaró culpable y fue condenado a cadena perpetua por asesinato en primer grado. Los miembros del jurado se inclinaron por los planteamientos y pruebas presentadas por la fiscalía quienes alegaban que un sonámbulo no sería capaz de cambiarse de ropa, esconderla junto al cuchillo, calmar al perro, lavarse las manos y colocarse un vendaje “inconscientemente”, además una de las opiniones que más peso tuvo fue el hecho de que Falater no se despertara al momento de sumergir el cuerpo de su esposa dentro de la piscina y tener contacto con el agua.

Pero existen casos en los que el acusado resulta ser inocente, un caso conocido es del Steven Steinberg, quien en 1981 asesinó a su esposa, acertándole 26 puñaladas. Durante el juicio, el médico psiquiatra Martin Blinder declaró que el asesinato fue cometido durante una “reacción disociativa”.

Otro caso conocido se produjo en 2008, cuando Brian Thomas estranguló a su esposa de 40 años, quien se encontraba dormida. Según la investigación, se estableció que la muerte fue accidental. Cuando aconteció el hecho, la pareja se encontraba de vacaciones; durante el día recibieron amenazas por parte de un grupo de jóvenes y de acuerdo a las declaraciones de Thomas, durante la noche tuvo una pesadilla, dijo haber visto encima de su esposa a un hombre que estaba cubierto con un paño negro. Aseguró que le gritó al sujeto, lo tomó del cuello y lo apretó fuertemente. Pero cuando despertó, se encontró con sus manos alrededor del cuello de su esposa, tuvo conciencia del hecho y llamó a la policía.

Quizá uno de los casos más famosos y conocidos mundialmente es el de Kenneth Parks, un joven de 25 años, que en mayo de 1987 fue capaz de conducir su automóvil por más de 25 kilómetros hasta la casa de sus suegros. Allí atacó a su suegro, lo dejó inconsciente y apuñaló a su suegra, causándole la muerte. Luego se dirigió a la estación policial para reportar un caso de asesinato. Parks dijo no recordar nada sobre el asesinato y que no tenía motivos para cometerlo. Según dijo, estaba desempleado y que esa noche se fue a dormir pensando en cómo iría a visitar a sus suegros al día siguiente con su esposa para hablarles sobre su situación económica. Después de su aprensión y posterior juicio, fue hallado no culpable del asesinato de su suegra.

Los casos de asesinato a manos de personas sonámbulas son cada vez más frecuentes, incluso en los Estados Unidos, el doctor Michael Cramer creó el primer laboratorio forense del sueño para ayudar en los casos en los que la defensa de un acusado basa su argumento en el sonambulismo.

Con lo leído anteriormente muchos nos preguntaremos ¿por qué se produce el comportamiento violento en estos casos? Por ello, decidí incluir la explicación del doctor Michael Cramer al respecto: “Las estructuras cerebrales como el hipotálamo, encargado de regular el sueño, están al lado del cerebro medio, donde se encuentran las conductas primitivas de la evolución. Por eso, cuando el impulso eléctrico se dispara, despierta esa parte del cerebro, dejando dormidas a otras como la corteza frontal. Eso hace que no haya inhibición en las reacciones de ira mientras se experimenta un episodio de sonambulismo.”

Por ello, afirma Cramer, “los asesinatos más violentos tienden a ocurrir en una noche de terror para el sonámbulo o después de que alguien los intenta despertar, desatando en él una respuesta violenta desinhibida.”

Cuando una persona sonámbula es sometida a un scan cerebral, un hecho de por sí muy complicado y del cual se han reportado pocos casos, los resultados han revelado que mientras la corteza frontal estaba dormida, la amígdala y el sistema límbico (parte del cerebro que controla las emociones) se activan en exceso.

Continuando con las opiniones del doctor Cramer, “el sonambulismo podría ser una condición que se presente en todos nosotros, pero bajo ciertas condiciones, todo lo que se necesita es que se desestabilice nuestro sueño.” Las condiciones a las que se refiere el doctor Cramer son la privación del sueño, el ruido o patrones de sueño interrumpidos por estrés, consumo de alcohol o incluso pasar una noche en el sofá pueden causar interrupciones suficientes para vulnerar a una persona a errores de conexión cerebral.

Perspectiva médica y legal

De acuerdo al artículo “Sonambulismo – Pesadilla para las cortes” publicado el 9 de mayo de 2000 por Ayako Kado y Larry R. Fisher de la Universidad de Colorado. El sonambulismo es una excusa para la conducta criminal que ha representado un dolor de cabeza para las cortes. El dilema para el sistema legal envuelve la decisión sobre si el sonámbulo debería ser absuelto o condenado por el crimen. Los jueces necesitan sabiduría divina para deshacer este nudo. Los veredictos de los tribunales no han sido mundialmente compatibles con cada caso de violencia relacionada con el sueño. Algunos sonámbulos han sido declarados culpables y otros han quedado en libertad.

¿Cuál es el papel del ADN en el desarrollo del sonambulismo?

Un grupo de investigadores de la Universidad de Washington reportó que el problema puede surgir a raíz de una alteración del código genético en el cromosoma 20, que aseguran puede ser suficiente para que una persona padezca sonambulismo. Para realizar el estudio, utilizaron muestras de saliva para analizar el ADN y observaron que el problema podría surgir de una alteración del código genético. Aunque hasta el momento no se ha establecido cuál es el gen exacto que condiciona la aparición del trastorno, los autores afirman que la clave puede ser una alteración de la adenosina desaminasa (ADA), una enzima que ya se ha relacionado con otras patologías del sueño.

¿Interesante verdad? El tema puede resultar hasta inquietante y seguramente después de esta lectura tendremos más cuidado al intentar conciliar el sueño. Espero que el tema haya sido de su agrado y continúe visitando este espacio dedicado a la medicina forense y la criminología.